Hace solo 4 días que nuestro presidente del Gobierno Rodriguez Zapatero mantuvo un encuentro privado en el Vaticano con el Pastor alemán Joseph Ratzinger, curiosa y excepcionalmente a la vez que con el primer ministro italiano Silvio Berlusconi. Parece ser que entre los temas tratados estaba el anteproyecto de reforma de la “Ley de libertad religiosa y de conciencia” que –aunque sin prisa- prepara ya el ejecutivo español.
Lo que no ha trascendido es que ZP le haya comunicado al Papa que ya es hora de ir recortando las prerrogativas con su Iglesia, pues sin ello –querer la igualdad sin tocar los privilegios- la susodicha ley no deja de ser una burda patraña. Tampoco se supo que le haya denunciado el concordato vigente –acuerdos Iglesia Estado, para ser más exactos- que son la madre del cordero y no “Pascual” precisamente.
En tiempos de crisis, tijeretazos, decretazos y reformas laborales, donde al gobierno no le tiembla la mano para recortar derechos sociales y meter la mano en el bolsillo de los pensionistas, dependientes y jubilados/as, ya hemos sugerido todo un paquete fiscal que demuestra que con una fiscalidad progresiva que haga pagar mas a quien mas tiene y gana y con la recuperación de determinados impuestos como Patrimonio o Sucesiones, mas alguno que otro a los beneficios y la riqueza en general, no habría que tocar ni pensiones, ni gasto social.
También hemos apuntado ya otras formas de racionalizar el gasto como era, recortar los nada trasparentes gastos de la Casa Real, o reducir enormemente el loco gasto militar (que de eso en la mancha, con los tigres “made in Albacete” y su escuela de pilotos de la OTAN, sabemos bastante), incluida la retirada de nuestras tropas de Afganistán.
Pero hoy mira por donde se nos ocurre que -a raíz de esta “santa” visita- ¿por qué no recortar ese montante de subvenciones a la Iglesia Católica (6.800 millones € en 2009) que, ya en 1979 se comprometió -en los citados Acuerdos con la Santa Sede-, a su autofinanciación en 4 años?
Aunque a alguien pueda parecerle un contrasentido que el infrascrito vaya contra su Iglesia, resulta que para mas INRI, ha sido un representante de su partido, Gaspar Llamazares, el que ha preguntado al gobierno cuánto nos van a costar los próximos viajes del Papa a España, pero el Parlamento se ha quedado sin saberlo. Eso sí nos hemos enterado que el viaje para las “Jornadas Mundiales de Juventud 2011”, que Monseñor Rouco definió como “evento de escala mundial”, ha sido declarado por este gobierno supuestamente aconfesional y laico “acontecimiento de excepcional interés público” para así poder incluir en los presupuestos Generales del Estado una generosa subvención –puede que de 25 millones de euros- y permitir que grandes empresas como Santander, Telefónica o El Corte Inglés, gocen de exenciones fiscales de hasta un 80%, justo ahora que hablamos de la necesidad de recaudar fondos para las arcas públicas.
¿Alguien se ha parado a pensar porqué hace ya varios meses que los otrora vociferantes jerarcas ultraconservadores de mi querida iglesia católica ya no se manifiestan, ni salen a la calle, ni lanzan sus incendiarias soflamas contra el gobierno de ZP?
SI QUIERES
Wikio